Lo que solemos hacer en Clínica Áureo es poner en una primera sesión una dosis de bótox un poco inferior a la que consideramos necesaria y después en una segunda sesión se retocan las zonas que han quedado demasiado activas. De esta forma nos aseguramos de que el resultado final no queda artificial ni extraño.
En algunos pacientes se opta por dejar algunas arrugas y no eliminarlas totalmente, esto es en personas que utilizan el músculo frontal para abrir bien los ojos ya que si no les quedarían expresiones extrañas, y en hombres. Los hombres con la frente muy lisa pueden tener un aspecto feminizado así que es mejor tratar de forma aún más moderada y comedida para que no les cambie tanto el rostro.
Ya ves que siempre haremos un tratamiento personalizado para cada paciente en función de lo que necesita y lo que busca.